La manzanilla romana es una planta con una larga tradición medicinal (más de 2000 años). Ya era utilizada por los egipcios y musulmanes, siendo una de las nueve hierbas sagradas de los sajones, la llamaban “maythen”, se la considera el médico de las plantas, puesto que mejora la salud de las plantas de su alrededor. La manzanilla romana es la variedad terapéutica; es muy aromática, tiene efecto analgésico, antianémico, antineurálgico, antiinflamatorio, antiséptico, antiespasmódico, bactericida, cicatrizante, sedante, tónico. Funciona muy bien en pieles sensibles, acné, alergias, quemaduras, dermatitis, eccema, picaduras de insectos…
El aroma de este jabón es un combinado entre el aroma natural de la propia manzanilla y el aceite esencial de bergamota que le hemos añadido.
La bergamota tiene un aroma muy refrescante, es antiséptica, regeneradora de las células de la piel, revitaliza el sistema nervioso y repele los insectos.
En la esfera emocional la bergamota combate el estrés y es adecuada para reducir el deseo de fumar. Además, ayuda a conciliar el sueño. Ayuda en la ansiedad, depresión y mejora el humor.
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